Son para uso exclusivo en interiores y para distancias muy cortas. Generalmente, aunque hay muchos modelos, el andador de interior lleva dos ruedas delanteras y la parte posterior va apoyado en dos tacos o conteras de goma, que si se utilizaran en el exterior se desgastarían enseguida y además se engancharían con cualquier desnivel de las aceras. Los andadores de interior son ideales para utilizar en domicilios o residencias, dando una gran estabilidad al paciente o usuario.