Andadores de exterior

En este tipo de andadores es necesario, e incluso casi imprescindible, que lleven ruedas traseras, ya que van a ser utilizados en el exterior. Además de las ruedas traseras, pueden incorporar asiento, cesta o bolsa y algunos accesorios más, pero quizá lo más importante sea la elección de los frenos, es decir, frenos de maneta o freno a la carga (con la presión ejercida por el usuario con su propio peso).

Andadores con freno a la carga o presión

Son muy seguros ya que en cuanto la persona carga su peso en el andador las ruedas traseras suben haciendo que las gomas, también traseras, contacten con el suelo y frenen el andador. Estos modelos son perfectos para personas que necesitan un andador para salir a la calle, y que recorren distancias medias. Sobre todo está indicado para personas que tienen problemas en las manos, falta de agilidad o artrosis, que no le permiten usar un andador con frenos con manetas.

Andadores con frenos de maneta

Estos andadores están preparados para salir a la calle y hacer distancias medias-largas. Además este andador no se frena al ejercer presión sobre el mismo y la única manera de frenarlo es accionando las manetas de freno, como en una bicicleta, haciendo que la frenada sea aún más segura Esto lo hace totalmente incompatible con personas con poca agilidad en las manos, ya que no frenarían a tiempo el andador pudiendo sufrir una caída. Prácticamente todos los andadores con este tipo de frenos llevan asiento incorporado, teniendo que bloquear los frenos para sentarse, existiendo diferentes sistemas de bloqueo según el modelo de andador.